dilluns, 30 de novembre del 2009

La tala masiva para dibujar las Líneas de Nazca cambió el clima y acabó con una civilización


  • Un estudio británico concluye que los símbolos de los nazca fueron su perdición
  • Esa árida región peruana era fértil gracias a la humedad que fijaban los árboles
  • El informe se presenta en Barcelona antes de la cumbre climática de Copenhague
Ampliar fotoLíneas de NazcaDibujo conocido como ’El viajero’ o ’El mexicano’, una de las más famosas Líneas de Nazca.Pilar Olivares / Reuters
Ampliar foto Hojas de huarangoLos huarangos retienen la humedad en el desierto gracias a sus profundas raíces.BBC
RTVE.es / Reuters 02.11.2009Los misteriosos indígenas que dibujaron las Líneas de Nazca en el desierto del Perú cavaron su propia tumba con esa deforestación hace 1.500 años, según un estudio divulgado este lunes.

Los nazca, famosos por sus gigantescos dibujos geométricos o de animales visibles desde el aire, fueron incapaces de cultivar suficientes alimentos en sus tierras porque la escasez de árboles convirtió al clima en demasiado seco, explica un equipo de la Universidad de Cambridge.

"Una antigua civilización suramericana que despareció hace unos 1.500 años contribuyó a su propio final al dañar el frágil ecosistema del lugar", concluyen los científicos ingleses en su informe que presentarán con motivo de la reunión en Barcelona durante esta semana de negociadores de 175 países de cara a la decisiva cumbre del clima de Copenhague.

En los valles de la región Ica donde vivían los nazca surgieron claros por la corta de árboles huarango, una especie que alcanza los 1.000 años de vida y que ayudan a regular la fertilidad y la humedad del suelo.
"Talaron tantos árboles que se llegó a un punto en el que el ecosistema árido resultó dañado de forma irreversible", dice el estudio publicado en el Latin American Antiquity.

Hasta ahora, la desaparición de esta cultura había sido atribuida por algunos arqueólogos al fenómeno climático del Niño, que causó grandes inundaciones en la zona.

"Eran unos bosques muy particulares", afirma David Beresford-Jones, investigador principal. "El huarango es un gran fijador de nitrógeno y era una importante fuente de comida, forraje, madera y combustible para la población".

Sus raíces muy profundas ayudaron a crear un microclima húmedo. Los bosque de huarangos que quedan en la región del sur del Perú están siendo destruidos por el aprovechamiento clandestino del carbón vegetal.