dimecres, 4 de novembre del 2009

La catalogación antropométrica empezó en la Francia del siglo XIX...

"Llaves y tarjetas de crédito acabarán pronto en el museo"

VÍCTOR-M. AMELA - LA CONTRA, LA VANGUARDIA 28/10/2009

Tengo 42 años. Nací en Barcelona y vivo en Tarragona. Soy profesor de Ingeniería Informática en la Universitat Rovira i Virgili, especialista en biometría. Estoy casado y tengo dos hijos, de 6 y 8 años. Soy catalanista. Soy ateo. Eres único en huella dactilar y palmar, iris, retina...

oy único?

Único. Y es algo que puede medirse:

S eso es la biometría.

Midamos, pues.

Vea sus huellas dactilares: no las hay iguales en el planeta.

¿Seguro?

La probabilidad de que otro ser humano tenga estas mismas huellas dactilares es de 10-18 (0,0000000000000000001%).

Casi igual a cero, vamos.

Si la población humana es hoy de 6.000 millones de personas, ¡deberíamos multiplicarla por cien para dar con otras huellas digitales iguales! Pero como la Tierra no puede sostener a más de 12.000 millones de personas..., esté tranquilo: es único en ese rasgo.

¿En qué otros rasgos soy único?

En el iris. En la retina. En la red venosa palmar. En la geometría de la mano o de la oreja. En las huellas podales. En la fisionomía del rostro. En la antropometría. En el ADN, presente en sangre, semen, orina, sudor, lágrimas, piel, bulbos de cabellos...

Vamos por partes: iris...

En el aeropuerto de Amsterdam usan ya pasaportes por iris: una máquina te lee el iris, y pasas directo. ¡Más seguro que un policía!

¿No hay dos iris iguales?

No. Pero si remotamente un iris pudiera falsificarse, hay algo imposible de falsificar: la retina, con su compleja red vascular, distinta en cada persona e invisible a simple vista (está detrás de la pupila). Existen detectores para leerla, y se usan en algunos sitios.

¿Gracias a los ordenadores?

La informática y los ordenadores permiten encontrar a quién corresponde una huella dactilar entre millones de huellas de un banco de datos ¡en sólo dos segundos!

¿Se hace aquí?

Los Mossos d´Esquadra, en dos segundos, encuentran la huella más parecida a la que analizan entre las que tienen fichadas. Si quieren buscar entre las fichadas por los DNI - protegidas-,deben pedir permiso al juez.

¿Qué rasgo biométrico es más seguro? La red vascular palmar - venitas de la palma de la mano-es única e irreproducible. Se usa ya para acceder a centros militares, centrales nucleares...

¿Y si un terrorista corta una de esas manos, y la usa para entrar?

Los lectores de iris, dedos o manos detectan temperatura y micropulsaciones para evitar esa trampa. Un órgano muerto no vale.

¿Se usa la biometría ya para accesos?

Yo accedo a mi ordenador personal o a mi móvil sin contraseñas, sólo con mi huella dactilar: es más seguro y práctico. ¡No necesito memorizar claves! Pronto todos los accesos serán así.

¿Cuándo?

Hoy cargamos en los bolsillos llaves de casa, del garaje, del coche, del armario, de la caja fuerte, tarjetas bancarias... ¡Nuestros nietos las verán sólo expuestas en museos!

¿Sí? ¿Y cómo entraremos en casa, cómo sacaremos dinero?

Con nuestro cuerpo. Tu cuerpo dirá quién eres. Dedo, ojo, cara... Todo eso puede medirse y leerse cibernéticamente. Los antiguos egipcios ya usaron rasgos físicos para identificar a obreros de las pirámides (un corte en una oreja, señales...) y evitar que uno cobrase dos veces: ¡prehistoria de biometría a ojo desnudo! Hoy, la inteligencia artificial permite hasta descifrar movimientos y comportamientos.

¿A qué se refiere?

Por el modo de teclear podemos saber quién ha tocado un ordenador. Otro ejemplo: si estás nervioso por algo, te mueves de cierta manera. Si cargas una mochila con bomba, también. En aeropuertos ya hay detectores de estas conductas motrices: activan alarmas para interceptar a esa persona sospechosa e investigarla.

Las máquinas acabarán sabiendo lo que pensamos...

Eso no puede medirse. Y ya se desechó aquella tesis frenológica del siglo XIX que postulaba que la forma de tu cráneo delataba si eras violento o criminal...

Me citaba antes la antropometría...

Nuestras proporciones corporales han determinado altura de mesas, sillas, cocinas, puertas, asientos de coche, tallas de ropa... Le Corbusier estableció una antropometría de uso para arquitectos que sigue vigente…, aunque algunas medidas han cambiado.

¿Cuáles?

Los holandeses son hoy las personas, en promedio, más altas del mundo. O sea, los que hoy más sufren en los asientos de los aviones, de dimensiones anticuadas... ¡Deberían rediseñarse! Los españoles somos hoy 14 centímetros más altos que hace un siglo. Los norteamericanos son los más obesos del mundo..., ¡seguidos de los españoles!

¿Las tallas de ropa y calzado responden a esos patrones corporales?

Sí, por eso varían por continentes. La catalogación antropométrica empezó en la Francia del siglo XIX, cuando su policía creó fichas consignando color de ojos, tipos de nariz (establecieron seis tipos), orejas...: se simplificaba la descripción de sospechosos.

Hasta llegar a los análisis de ADN...

El definitivo carnet de identidad de cada uno... si no hacemos clones de personas.

¿Se usará todo esto para tenernos fichados y controlados?

Para reforzar la seguridad de las personas... o para discriminarnos según la predisposición a tener patologías. Eso pasa con cualquier nueva tecnología: puede usarse bien o mal, y yo creo que esta la usaremos bien.